Qué te parece la idea de recorrer las mismas calles que estaban llenas de vida hace más de 20 siglos? Seguro que cuando piensas en ello te imaginas recorriendo algunos grandes monumentos de Roma y otros de Europa. Y es verdad que allí encontrarás verdaderas joyas. Pero no es necesario irse tan lejos para sentir que viajas en el tiempo. El mapa de Galicia está salpicado de restos arqueológicos en los que podrás recrear cómo era vivir en el siglo I d.C o incluso antes. En esta ocasión queremos que sigas leyendo y descubras tres de los mayores castros de Galicia.
Castro de San Cibrao de Las
Conocido como 'A Cidade', el castro de San Cibrao de Las es uno de los mayores de Galicia, tanto en extensión como en riqueza. Según los datos de los diferentes estudios arqueológico, este espacio situado entre los términos municipales de Punxín y San Amaro (Ourense) estuvo ocupado de manera continua desde el siglo II a. C. al II d. C. además de ocupaciones esporádicas posteriores.
Desde el 1922 hasta la actualidad se ha trabajado en la investigación y excavación de este yacimiento. Aunque entre la década de los 50 y la de los 80 sufrió un periodo de abandono, finalmente se ha descubierto parte importante de su potencial.
El castro se estructura en dos recintos amurallados reforzados con una tercera muralla, un foso y un parapeto.
Las calles se distribuyen de manera perimetral, algunas con pavimento enlosado, y también transversales o radiales, distribuyendo las edificaciones adaptándose al terreno. Predominan las construcciones de planta rectangular frente a las circulares.
Pero una de las construcciones más singulares descubiertas en el Castro de San Cibrao de Las es la Fuente aljibe, con una mina de caudal considerable.
Además de la parte arquitectónica, en el castro se han localizado armas, como dos puñales de antenas o piezas de orfebrería en bronce, desde alfileres a prendedores de pelo pasando por colgantes. También se localizaron monedas de bronce e inscripciones.
Y esto es solo una muestra de lo que podemos encontrar a lo largo de 95.900 metros cuadrados, la superficie que guardan las murallas de San Cibrao de Las.
Castro de Santa Trega
Sin duda estes es el castro más popular de Galicia. En el municipio de A Guarda, el Castro de Santa Tegra fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional en el 1931 y también tiene la consideración de Bien de Interés Cultural.
Se trata de un pueblo con estructuras de tamaños semejantes y pacífico ya que tan solo una sencilla muralla delimita su perímetro.
Uno de sus mayores atractivos son las cabañas en gran estado de conservación -además de las reconstruidas- y que permiten recrear mentalmente como sería la vida en aquella época. Casi todas estas viviendas son de planta circular y ovalada con paredes independientes con un grosor de unos 40 centímetros. Muchas de las cabañas presentan un vestíbulo de acceso. En el interior, algunas cuentan con bancos adosados de piedra o de losa.
Son también muchos los hallazgos cerámicos y de vidrio romano que se han encontrado en el yacimiento y que se pueden ver en el museo del castro. Igualmente atractivas son las piezas de joyería, especialmente los torques.
Castromao
Y para terminar este primer paseo por algunos de los mejores castros de Galicia, nos vamos hasta muy cerca de Celanova. Quizá este castro no sea uno de los mayores en extensión, es más, cuenta con unas reducidas dimensiones pero permanece en un excelente estado de conservación. De hecho, muchos de los objetos encontrados en el yacimiento se encuentran en el Museo Provincial de Ourense.
Se encuentra a 732 metros de altura, desde donde controlar el curso del río Arnoia, y en las inmediaciones de la que fue la Vía XVIII.
Este terreno, que presenta un fuerte desnivel, estuvo habitado durante la época castrexa, remontándose al sigo VI a. C y mantuvo población hasta el III d. C.
Y hasta aquí llegamos con este primer paseo por parte de los extraordinarios castros de Galicia. No nos pierdas la pista porque prometemos repetir plan con nuevos destinos.