Galicia está salpicada de señales de identidad. La arquitectura es una de las herramientas que dotan a una comunidad de un aspecto genuino. Y aunque siempre reparamos en las construcciones más grandiosas como iglesias, catedrales o fortalezas… Galicia cuenta con elementos que pertenecieron -y pertenecen- a lo cotidiano, cargadas de simbolismo y belleza. Es el caso de los hórreos, una construcción de uso agrícola destinada a secar, curar y guardar el maíz u otros cereales antes de desgranarlos y molerlos. Constan de una cámara de almacenaje estrecha que permite el paso del aire y elevada del suelo para evitar la entrada de humedad y animales.
En la actualidad, los hórreos, además de conservar esta función tradicional, también se utilizan como elemento decorativo al tratarse de una seña de identidad. Tanto es así que en 1973 se aprueba un decreto de protección para todos los hórreos antiguos de Galicia y de Asturias. Así que es esta ocasión te proponemos un recorrido por los mejores conjuntos de hórreos en Galicia.
LOS HÓRREOS MÁS ESPECTACULARES DE GALICIA
Son admirados por los habitantes de los lugares en los que se ubican, pero también por los visitantes que se acercan a sus pies para contemplarlos extasiados. Son parte del ADN gallego y aquí te vamos a descubrir los hórreos más importantes de Galicia.
HÓRREOS DE COMBARRO. Parte del encanto de Combarro, reconocido como uno de los pueblos más bonitos de España, reside en su conjunto de hórreos, declarado Monumento histórico-artístico. Siguiendo la línea del mar, Combarro muestra una de las mayores concentraciones de hórreos de Galicia, nada más y nada menos que una treintena de estas construcciones. Pero, y aunque ahora están cargados de sentido monumental, no hay que olvidar que se tratan de edificaciones con una utilidad definida.
Como decíamos, los hórreos de Combarro están pegados al mar, en la Ría de Pontevedra. Cuando la marea sube, el agua puede llegar hasta su base. Así, los botes, necesarios en ocasiones para acercarse a los cultivos y transportar los productos, podían alcanzar hasta este punto de almacenaje ahorrando tiempo y esfuerzo. Pero lo mejor para conocer la historia de los hórreos de Combarro es visitarlos y charlar con la gente del lugar.
HÓRREOS DE A MERCA. Hasta 34 hórreos en A Merca forman el mayor conjunto de estas construcciones, además de tratarse de los hórreos mejor conservados de Galicia. A mediados del siglo XX, en el lugar de O Campo da Feira, se construyeron más de una treintena de hórreos cuyo objetivo era, como ya comentamos, el de guardar y conservar los cereales, pero su belleza los ha elevado a la categoría de monumento.
Los hórreos de A Merca están realizados con pies y tornaratos de piedra, pero el lugar dedicado a guardar el grano es de tablas de madera separadas por, aproximadamente, un centímetro. El motivo, poder ventilar el interior. La cubierta es a dos aguas, realizada con teja del país.
HÓRREOS DE QUINS. Pertenecen al ayuntamiento de Melón, en la provincia de Ourense, pero los famosos hórreos de Quins se encuentran en la parroquia de Santa María de Quins, donde forman uno de los mayores conjuntos de toda Galicia. Se trata de 24 hórreos construidos sobre una colina y junto a la iglesia, pero su singularidad radica en su peculiar distribución.
PIORNEDO. Otro bello pueblo que cuenta con un hórreo tan espectacular como inconfundible. En la comarca lucense de Os Ancares se localiza Piornedo, una aldea de origen prerromano en la que se conservan de manera extraordinaria tanto las pallozas como algunos hórreos. Las primeras eran las construcciones que servían tanto de vivienda como de refugio para el ganado y se han usado hasta los años 80.
Sus inconfundibles techos vegetales hacen juego con el precioso hórreo que hay en este pueblo de alta montaña. Es circular, por lo que no se parece en nada a los habituales hórreos alargados que se ven en otros puntos de Galicia. Dos pares de pies se encargan de levantarlo sobre el suelo.
LOS HÓRREOS MÁS GRANDES DEL MUNDO
Combarro o A Merca destacan por el número de hórreos y su estado de conservación. Llaman la atención esos impresionantes conjuntos de hórreos, pero a la hora de hablar de estas espectaculares construcciones hay otras que tampoco pasan desapercibidas, en este caso por su tamaño.
HÓRREO DE CARNOTA. En Carnota se localiza uno de los mayores hórreos de España, con casi 35 metros de longitud. Teniendo en cuenta que este tipo de construcciones se concentran en el norte de la península ibérica, podemos decir que el Carnota es también uno de los mayores hórreos del mundo. Su simbología, conservación y arquitectura le ha valido el reconocimiento de Monumento Nacional.
Este símbolo de la provincia de a Coruña fue construido en el siglo XVIII, entre los años 1768 y 1783. Se encuentra en un entorno privilegiado junto a una magnífica casa solariega, un palomar y la estupenda iglesia de Santa Comba. Una visita que debe estar en tu lista de escapadas próximas.
HÓRREO DE ARAÑO. El Hórreo de Araño se localiza en Rianxo, es del siglo XVII y está catalogado Bien de Interés Cultural. Su impresionante longitud alcanza los 37 metros y eso provoca que sea el más largo del mundo. Además, tiene casi dos metros y medio de anchura y 2,70 de alto, por lo que su capacidad de almacenamiento total casi llega a 170 metros cúbicos.
El dato más peculiar de esta construcción es que no tiene pies o pilares como otros hórreos famosos, pero eso le da aún más personalidad. La construcción, además del hórreo, incluye la Iglesia de Santa Baia y una capilla que está dedicada a Nuestra Señora de los Milagros.
HÓRREO DE LIRA. El Hórreo de Lira, con 36,53 metros, supera en longitud al de Carnota, del que tan sólo le separan cinco kilómetros. Se trata de una composición del siglo XVIII de hórreo y palomar, está construido en granito y mide 1,60 metros de ancho. Un total de 22 pares de pies lo separan del suelo.
HÓRREO DE POIO. En Poio, junto a Pontevedra y a pocos kilómetros de Combarro, se levanta el que puede ser el hórreo más grande del mundo. Está localizado junto al monasterio de San Juan de Poio, de origen benedictino, y data del siglo XVIII. Mide un total de 33,46 metros y tiene un ancho de 3,368 metros, por lo que ocupa 123 metros cuadrados de planta y está considerado el más amplio de toda la región.
Los hórreos en Galicia son la prueba de que la belleza reside hasta en las cosas más prácticas.