Galicia es la segunda mayor región termal de toda Europa y Ourense solo es superada por Budapest en reserva de guas. La comunidad gallega cuenta con nada más y nada menos que con 300 captaciones de aguas. Con estas cifras, que se suman al impacto que el turismo termal tiene en la economía gallega, hace que la comunidad sea muchas veces pionera en lo que al sector se refiere. El nuevo paso que se prepara es un nueva ley de termalismo de la que queremos hablarte hoy.
Certificación de balnearios
La nueva ley del termalismo en Galicia será un paso más en las medidas de la comunidad para prestar un buen servicio s y que a los usuarios no se les de gato por liebre. Es decir, que tengan la certeza de que si van a un balneario este cumplirá unos requisitos o que un spa es otro tipo de establecimiento con características diferentes.
Para garantizar este tipo de aspectos ya existe un trámite de certificación de balnearios. Para conseguir esa categoría los establecimientos deben ceñirse a una serie de normas.
Los balnearios, como establecimientos sanitarios deben conservar y mantener los requisitos técnicos que se requieren para conseguir la autorización sanitaria. Además, deben garantizar que la atención sanitaria se presta por personas debidamente preparadas y con la titulación pertinente. Entre otras cuestiones, también es necesario que los balnearios cuenten con un director sanitario que asuma la responsabilidad del centro.
También es condición indispensable que los balnearios garanticen que se presta atención sanitaria y superar la inspección sanitaria sobre las actividades, organización, funcionamiento promoción y publicidad.
Una de las últimas obligaciones que deben cumplir los balnearios para alcanzar su certificación es la protección del recurso mineromedicinal, su principal fuente natural.
La nueva ley
Por su parte la nueva ley de termalismo definirá los espacios propios de este campo y convivirá con la normativa que regula los balnearios, diferenciando los usos lúdicos de los terapéuticos.
En la norma quedarán explicitadas las obligaciones de quienes ofrecen los servicios de turismo termal, así como los derechos de los usuarios de un sector propio en Galicia, a los que se pretende garantizar el uso de estos servicios. Se trata de regular todo aquello que no tiene propiedad mineromedicional, pero es termal.
Además velará por la la salubridad e higiene de los espacios, garantizará la sostenibilidad ambiental, protegerá la integridad del espacio termal y promoverá el desarrollo económico y social.
Después de todo esto queda claro dónde reside la importancia para el usuario de toda esta legislación sobre el termalismo. Y es, por un lado, obtener unos estándares de calidad y, por otro, definir exactamente cada tipo de establecimiento para lograr que los usuarios reciban los servicios y tratamientos que realmente desean y requieren.
Esperamos haberte acercado un poco más al marco legar que ampara y regula todo lo relacionado con los balnearios y el termalismo.