Casi sin saber cómo nos hemos metido de lleno en el verano de 2021. A pesar de que la pandemia parece estar dando ya sus últimos coletazos, hay que ser más responsables que nunca y practicar el turismo seguro. Te recordamos que nuestros balnearios Caldaria cuentan con todas las medidas sanitarias necesarias para disfrutar del descanso sin preocupaciones.
Pero, ¿qué más necesitas para disfrutar de un verano saludable? Sigue leyendo para averiguarlo.
La hidratación, fundamental
El calor aprieta y en los últimos años hemos tenido veranos de 35 y 40 grados a la sombra. ¿Qué es lo primero que hay que hacer? Hidratarse correctamente. Los médicos recomiendan consumir al menos dos litros de agua al día aunque puede ser algo más si hay riesgo de deshidratación. ¡Pero ojo! No hace falta beberlos, sino que también puedes consumir alimentos ricos en agua, así como disfrutar de tés o zumos naturales que realicen la misma función de hidratación. ¡No esperes a tener sed para beber! Cuando ya tienes sed es que tu cuerpo te lanza una alarma de que está deshidratado.
Evitar los golpes de calor
Sales a pasear y te has olvidado un sombrero o una gorra. ¡Cuidado! Puedes llegar a tener una insolación. En verano hay que tener especial cuidado con los golpes de calor. Entre los principales síntomas están una temperatura corporal elevada, respiración y frecuencia cardíaca acelerada, piel enrojecida, dolor de cabeza, náuseas y vómitos. Para prevenirlos es fundamental hidratarse, utilizar algo para tapar la cabeza del sol, evitar las bebidas alcohólicas, ducharse más a menudo de lo normal o evitar las comidas calientes o que aportan muchas calorías.
Colectivos de riesgo
Nadie está exento de sufrir una insolación o un golpe de calor, pero sí que es cierto que las personas mayores, los bebés o los niños menores de cuatro años están más expuestos. También lo están aquellas personas que toman tratamientos con antidepresivos o tranquilizantes, personas con movilidad reducida o con discapacidades físicas o psíquicas. En esta lista también se encuentran personas con enfermedades crónicas como obesidad, diabetes, hipertensión o enfermedades cardiorrespiratorias. Además, tienen mayor riesgo de sufrir un golpe de calor aquellas personas que realizan ejercicio intenso ya sea fuera o dentro de casa o aquellas personas que trabajan bajo el sol.
Cómo tomar el sol
Después de un año prácticamente encerrados en casa… ¡hemos tomado menos sol que nunca! Recuerda que la vitamina D es muy necesaria para fortalecer nuestro sistema inmunitario. Pero la solución para la falta de sol durante estos meses no se puede solventar en unos días. ¡Debes tomar el sol con cuidado!
Los primeros días, exponte menos. Es el mejor modo de no comenzar tus vacaciones o tus días libres quemándote.
Utiliza protección solar adecuada a tu piel y que proteja contra los rayos UVA y UVB. Elige una crema solar que también sea resistente al agua.
Utiliza gafas de sol y gorro. ¡Cuidado! Si estás en un lugar de playa, hasta la brisa puede quemarte. No olvides la protección solar también.
Ten especial cuidado con los más pequeños. Su piel es más sensible, por lo que debes utilizar protección +50 y reponer la crema en más ocasiones durante la exposición al sol.
Evita tomar el sol en las horas centrales del día. En estas horas el sol es más dañino y tu piel sufrirá los efectos.
¿Estás preparado para disfrutar del verano? Sabemos que tienes muchas ganas de volver a salir y recuperar la normalidad, ¡nosotros también! Sigue estos consejos y vive un verano emocionante.