En Brandomil, hoy en día, apenas viven 30 vecinos. Sin embargo, hace 2.000 años fue un importante asentamiento romano, uno de los más importantes de Galicia. Esta parroquia que pertenece al municipio de Zas cuenta ahora con un importante espacio arqueológico gracias al empeño de sus habitantes y del equipo que lleva años desenterrando los secretos de la finca de Pedra do Altar. Allí se esconde el Yacimiento romano de Brandomil.
Dónde está el yacimiento romano de Brandomil
La Vía XX, también llamada ‘per loca maritima’, era una de las calzadas romanas que unía las ciudades de Bracara Augusta y Asturica Augusta, las actuales Braga y Astorga. Lo hacía bordeando el litoral atlántico gallego y atravesando Brigantium y Lucus Augusti, lo que hoy es A Coruña y Lugo. Y una parte de esa Vía XX pasaba por Brandomil, una pequeña población cercana a Santa Comba y que se encuentra en el camino entre A Coruña y Finisterre.
Lino Gorgoso, director del proyecto de Brandomil, explica que la Vía XX romana pasaba por ese lugar. De hecho, se utilizó a diario durante 20 siglos, hasta que en la década de los 60 se construyó una carretera paralela. Ahora, las investigaciones del equipo de arqueólogos han confirmado que esa vía romana era la que se utilizaba en el Camino de Santiago, lo que da una idea de su importancia.
En Brandomil sigue en pie hoy en día un impresionante puente romano que da fe de su antiguo esplendor. Pero, además, desde hace años sus vecinos intentan averiguar cómo de grande fue el asentamiento romano que se sabe que existió aquí. De hecho, ya se hizo un primer descubrimiento en la finca de Pedra do Altar en el año 2007, encontrando una estructura romana en forma de L. El siguiente objetivo fue explorar la posibilidad de que hubiera un barrio extramuros del terreno.
La Fundación Brandomil compró los terrenos de Pedra do Altar en el año 2019, una inmensa parcela de 15.000 metros cuadrados que este año ha sido analizada con un georradar para conocer qué hay debajo del terreno. Los resultados no defraudaron y se encontraron pruebas de la existencia de distintas estructuras, por lo que se decidió dar el siguiente paso y excavar en diferentes zonas.
¿Qué hay en el yacimiento de Brandomil?
Lino Gorgoso y un equipo de seis arqueólogos se ha pasado todo el mes de agosto excavando, gracias al apoyo de la Dirección Xeral de Patrimonio y la Deputación da Coruña. Encontraron un pavimento en la zona del Rego de Barriazón que podría ser “una plaza entre varias casas o una vía complementaria a la ya descubierta”, aunque aún se tendrá que seguir excavando.
También se halló un muro y un yacimiento habitable, ambos en muy buen estado, en la parte oeste de la finca. En este mismo lugar aparecieron diferentes materiales cerámicos que los expertos han fechado en la segunda mitad del siglo I d. C. Incluso se han destapado lo que podrían ser unas terrazas, aunque los arqueólogos no quieren confirmarlo aún ya que este tipo de estructuras no solían construirse en la época romana.
Sí se sabe que falta parte de ese muro porque, probablemente, fue extraída a partir de la época medieval para utilizarlo como cantería. Gorgoso explica a La Voz de Galicia que “los vecinos sabían que en este lugar había mucha piedra, y aunque no sabían por qué estaba aquí, ellos la aprovechaban para hacer sus casas”.
¿Qué hay en el yacimiento de Brandomil?
Será necesaria una fuerte inversión para descubrir todo lo que aún oculta la finca de Pedra do Altar. De momento, los vecinos tendrán que conformarse con lo logrado este verano, ya que el equipo de arqueólogos ha dejado a la vista una gran parte de los descubrimientos realizados para que la zona pueda visitarse por los lugareños y también por los visitantes.
El arqueólogo está convencido de que “no solo se trata de un elemento turístico por el Camino de Santiago. Culturalmente, la importancia de Brandomil alcanza una altura tan interesante o más que cualquier otro yacimiento romano de Galicia”. Y eso que no son pocos, como el impresionante yacimiento de Aquis Querquennis cerca de la localidad ourensana de Bande.
El yacimiento de Brandomil no solo confirma las historias y leyendas de los vecinos de esta parroquia coruñesa, sino que también permitirá saber cómo vivían los romanos en esta zona de Galicia. Y, al visitarlo, no podemos dejar de pasar por el puente romano de Brandomil, que con casi dos milenios de historia, sigue en pie con sus cuatro arcos de medio punto, ofreciéndose como paso para quienes cruzan a diario el río Xallas.
