Los antibióticos son fármacos que se utilizan para combatir las infecciones causadas por bacterias. Sin embargo, se trata de medicamentos muy fuertes que pueden tener efectos secundarios como problemas digestivos, entre otros. Pero, ¿sabías que hay alimentos que, debido a sus propiedades naturales, actúan como antibióticos? Aquí tienes una lista con los 10 antibióticos naturales que no pueden faltar en tu dieta.
Ajo
El ajo es famoso por las muchas propiedades que posee: es fuente de vitaminas A, B1, B2 y C, tiene propiedades antiparasitarias y desinflamatorias, ayuda a luchar contra el colesterol y previene los problemas respiratorios. Además contiene alicina, un antibiótico natural que sirve para eliminar las bacterias dañinas de nuestro cuerpo. Eso sí, para que actúe hay que consumirlo fresco, ya que la alicina solo se forma a través de la catálisis de la enzima alinasa.
Miel
La miel es famosa por sus propiedades antiinflamatorias, antifúngicas y antibacterianas y se sabe que ya los romanos la utilizaban para luchar contra las infecciones de sus soldados. Es buena para el aparato digestivo, ayuda al hígado a funcionar correctamente y también al riñón, ya que limpia las toxinas de la sangre. El consejo es consumir miel sin procesar, orgánica, para que mantenga intactos sus poderes antioxidantes.
Regaliz
Masticar raíz de regaliz es una de las mejores maneras de luchar contra las infecciones en la boca gracias a sus propiedades antibióticas. Algunos estudios también le atribuyen propiedades antivirales, por lo que se usa contra el herpes, mientras la medicina china lo utiliza para luchar contra la bacteria Helicobacter pylori y, así, evitar úlceras estomacales. Se aconseja no consumir durante mucho tiempo por posibles efectos secundarios como presión alta o dolor de cabeza.
Eucalipto
Uno de los mejores antibióticos naturales para evitar infecciones en las vías respiratorias es el aceite de eucalipto. Esto se debe a que es rico en cineol, una sustancia con propiedades antibióticas de amplio espectro, es decir, que actúa contra una amplia gama de bacterias. También tiene propiedades antivirales, analgésicas y es muy usado para evitar problemas en la boca.
Salvia
La salvia es una de las plantas con más virtudes que se pueda encontrar. Ayuda a luchar contra las infecciones respiratorias, contra las bronquitis o las faringitis, pero también es muy conocida por ser un potente antiséptico que destruye todo tipo de gérmenes. Las mujeres suelen usarla para controlar los dolores menstruales, mientras algunos especialistas la recomiendan para ayudar a reducir la cantidad de azúcar presente en la sangre. Por si fuera poco, también actúa como relajante muscular para multitud de dolores, como los de espalda.
Aloe Vera
Las farmacias de medio mundo venden la sustancia que se recoge del interior de las plantas de aloe vera debido a sus magníficas propiedades como antiséptico para la piel y el sistema digestivo. Es un antibiótico natural, también conocido como sábila, y muchos médicos lo recomiendan para procesos catarrales: ayuda a remitir los dolores de garganta haciendo gárgaras.
Acacia
La acacia es un antibiótico natural de amplio espectro por la presencia de alcaloides. Estos compuestos químicos tienen propiedades defensivas y hormonales y se utilizan para combatir infecciones de la piel, respiratorias y urinarias. La forma de usar la acacia es por medio de sus flores, con las que se pueden preparar tónicos e infusiones, pero no con la corteza ni las semillas, ya que son tóxicas.
Propóleo
Muchas personas desconocen esta sustancia, pero es la que producen las abejas cuando recogen el polen de plantas y flores. Estos insectos transportan el propóleo a la colmena para mantenerla limpia y esterilizada, lo que da una señal de sus propiedades. Históricamente ha sido utilizado para fortalecer el sistema inmunitario y reducir la probabilidad de sufrir catarros, gripes, etc.
Semillas de pomelo
El pomelo es conocido por sus propiedades antisépticas que destruyen bacterias, virus y hongos. Sin embargo, su composición puede interactuar con algunos medicamentos, por lo que es importante comunicar al médico su consumo por si se diera el caso de contraindicación. Hay dos formas de hacerse con ellas: dejando secar las semillas al comer la fruta y luego machacándolas o comprándolas en una tienda.
Ajenjo
Una de las plantas milenarias por excelencia, dado que ya era usada por antiguas civilizaciones. Es famosa por sus propiedades para tratar problemas gástricos y tiene un peculiar sabor amargo por culpa de uno de sus componentes químicos, la absintina. Ha ganado en popularidad en los últimos tiempos, lo que ha generado que crezca su cultivo, sobre todo en lugares difíciles, ya que se adapta perfectamente a las condiciones adversas.
Ajo, miel, aloe vera, ajenjo… todos estos antibióticos naturales son conocidos por el hombre desde hace siglos y su uso ha perdurado en el tiempo gracias a sus propiedades. Anímate a incluirlos en tu dieta y verás cómo te sientes mejor de una manera sana y natural.