Para que tu estancia en un balneario tenga los mejores resultados debes cuidar el pre y el post. Una sencilla preparación previa y mantener unos pequeños hábitos después del proceso termal favorecerá que sus efectos beneficiosos sean más intensos. Y como queremos que saques todo el provecho a tu paso por el balneario, aquí te dejamos nuestros consejos para antes y después de una estancia de balneario.
Antes del balneario
Elige bien el lugar: Lo primero que debes hacer es elegir bien el lugar. Que no te tomen el pelo. Recuerda que hay diferencias sustanciales entre lo que es un spa y lo que es un balneario así que elige con conocimiento de causa. Después, piensa bien qué quieres, analiza los catálogos de programas qué tiene cada establecimiento y estudia las ofertas, siempre es mejor ahorrarse unos euros. Y no tengas prisa, reserva cuando tengas seguro que ese establecimiento es para ti.
Lleva solo lo imprescindible: En una ocasión ya te dimos todos los consejos que necesitabas saber para hacer correctamente la maleta, pero no está por demás recordarte que solo lleves lo imprescindible. Sí, quizá quieras hacer una cena especial y llevar algo un poco más arreglado, pero recuerda que vas a relajarte y aprovechar los tratamientos del balneario. Infórmate también de todo lo que te ofrece el balneario y así también evitarás llevar cosas que te puedan proporcionar allí mismo.
Deja todo listo para desconectar: La estancia en el balneario también implica desconectar, forma parte del relax que, se supone, buscas con este tipo de escapadas. Así que deja todo arreglado para que no te molesten durante esos días y para que tú tampoco tengas la cabeza en otra cosa que no sea disfrutar.
Fuera complejos: Olvídate de los complejos. No podrás relajarte si estás pensando en tener una postura siempre perfecta o que no se marquen arrugas en tu abdomen al estar sentado. Nadie está escrutando tu físico aunque a ti te lo parezca.
Después del balneario
Intenta mantenerte zen: Llegas relajado, con una sensación especial de bienestar y a la primera de cambio alguien te saca de tus casillas. No lo permitas, trata de mantenerte zen durante el mayor tiempo posible, conserva ese estado de relajación y, cuando piensas que va a fallarte, imagínate en uno de los baños termales en los que has estado.
Aplica los consejos que te han dado: Como sabes, los balnearios tienen un completo equipo médico que te evaluará y aconsejará. Además, todo el personal está especializado y, además de orientarte durante tu estancia, podrán darte consejos muy útiles que aplicar en tu día a día. Hazles caso, que no caigan en saco roto.
Un spa en casa: También puedes aprovechar tu estancia en un balneario para comprar algún producto con el que convertir tu casa en un spa. Así alargarás la experiencia y te llevarás parte de los beneficios del balneario a tu hogar.
Planea la próxima: Y nada mejor que planear la próxima escapada para conservar esa sensación de bienestar que uno trae después de unos días en un balneario.
Ahora sí que sí, con estos consejos estás más que preparado para sacarle todo el provecho a tu estancia en un balneario, ¿a qué esperas?