El remo es uno de los deportes más antiguos. Se sabe que 4.000 años antes de Cristo, en el Antiguo Egipto, los remeros competían en carreras para formar parte de la comitiva funeraria del faraón. También en la Grecia Clásica se hacían regatas de trirremes -naves con tres bancos de remeros-.
Pero sin remontarnos tan atrás en los tiempos, hoy queremos contarte la historia del remo en España, un deporte que practican en nuestro país cerca de 13.000 deportistas federados. Y además, podrás averiguar dónde se encuentra uno de los mejores lugares para su práctica.
¿Qué es el remo y cómo surgió este deporte?
Se define como remo el conjunto de prácticas deportivas que consisten en la propulsión de una embarcación en el agua con o sin timonel, mediante la fuerza muscular de uno o varios deportistas, usando una o dos palancas simples de segundo grado, sentados de espaldas en la dirección del movimiento. En una embarcación de remo todos los elementos portantes (donde se hacen los apoyos para realizar la fuerza) deben estar fijos al cuerpo de la embarcación, solamente el carro donde va sentado el deportista puede moverse (banco fijo o banco móvil).
Se considera que el remo como deporte nació en Reino Unido en el siglo XVII, como una actividad reservada a la alta nobleza. Posteriormente su práctica se extendió a otros países de Europa, como España. Según recoge la web de la Federación Española de Remo, ya en 1821se tienen noticias de actividad en el Real Club de Regatas de Barcelona. En sus inicios no tenía normas y su práctica siguió dos vías.
Por una parte, el remo de banco fijo, que respondía a la tradición marinera en el norte peninsular (Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco). En esta modalidad, el deportista está sentado sobre un asiento fijo, y la propulsión se realiza con el torso y con los brazos.
Por la otra, el remo de banco móvil, que es cuando la embarcación tiene un asiento sobre ruedas que permite utilizar las piernas en la propulsión de la embarcación.
En ambas modalidades, el remero se sienta mirando a popa, de espaldas a la dirección del movimiento.
Creación de normas y clubes
La expansión del remo por toda Europa va a influir en la evolución de este deporte, con embarcaciones cada vez más ligeras, rápidas y eficientes e introduciéndose mejoras técnicas que permiten a los remeros remar más eficientemente.
En 1882 se crean en España dos clubes de remo: el Club Catalán de Regatas (hoy Real Club Marítim de Barcelona) y el Real Club Mediterráneo de Málaga. En 1892 se constituye la Federación Internacional de Sociedades de Remo (FISA), que se encargó de unificar la normativa de este deporte.
El remo forma parte de los Juegos Olímpicos desde la cita de París 1900, puesto que en los primeros Juegos de la era Moderna, los de Atenas en 1896, el viento impidió que se celebraran las regatas en el puerto del Pireo. Entonces se disputó en modalidad masculina, sobre una distancia de 1.750 metros, y en seis categorías distintas. Desde entonces y hasta la actualidad, el remo ha estado presente en todos los Juegos Olímpicos. Las mujeres tendrían que esperar a debutar en una competición olímpica hasta Montreal 1976, cubriendo una distancia de 1.000 metros.
Dentro del remo olímpico se practican 14 modalidades, todas ellas de banco móvil, pero también existe el remo no olímpico, en el que se incluyen modalidades de banco fijo (como las tradicionales regatas de traineras en el norte de España).
La única medalla olímpica de España en remo -de plata- la consiguió Fernando Climent en las Olimpiadas de Los Ángeles 1984.
El mejor sitio para entrenar remo
Y uno de los mejores sitios para entrenar este deporte es el embalse de Castrelo de Miño (Ourense), en donde funciona el Cerlac, Centro de Entrenamiento de Laias, Arnoia y Castrelo.
Por las propias características del embalse de Castrelo, por las condiciones de temperatura, viento y precipitaciones del entorno, y por la calidad de las instalaciones, tanto en el Balneario Laias Caldaria como el en el Club Náutico de Castrelo de Miño, el Cerlac reúne todo lo necesario para el entrenamiento de alto nivel. Tanto es así, que en los últimos años han pasado por este centro equipos de diferentes países europeos e incluso de Australia.