Seguramente, los amantes del chocolate estarán de acuerdo en que hay pocas cosas más placenteras en la vida que comerse una onza de este rico y dulce producto. Quizás una de esas pocas cosas sea darse un masaje y relajarse mientras recibes los cuidados de profesionales de la salud y el bienestar. Pero, ¿no te has planteado nunca qué pasaría uniendo estos dos grandes placeres, el chocolate y los masajes, en uno solo? En HDOSO te explicamos todo lo que debes saber sobre los masajes de chocolate.
Masajes de chocolate
El masaje con chocolate es uno de los tratamientos que encontrarás en los balnearios Caldaria. Traslada los beneficios de este superalimento a tu cuerpo. No se trata solo de un programa de salud, también es una técnica de relajación y, al mismo tiempo, una forma de rejuvenecer tu cuerpo.
El paso previo a un masaje de chocolate es la realización de un peeling corporal, un proceso de exfoliación para eliminar las células muertas del organismo. Con esa técnica también se abren los poros, de forma que cuando se aplique el chocolate se reciban todas sus propiedades y se eliminan los posibles residuos acumulados en la piel.
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Una vez que concluye la exfoliación llega el masaje propiamente dicho: hay que aplicar el chocolate por la cara y las partes del cuerpo que nos interese, pero antes de hacerlo hay que prepararlo. Tiene que ser un chocolate puro, es decir, no se usan chocolates mezclados con leche. Además hay que mezclarlo con aceites esenciales para que adquiera la textura indicada.
Cuando el chocolate está fundido hay que esperar unos segundos a que tenga la temperatura idónea, ya que de lo contrario se podría quemar a la persona que va a recibir el masaje. Cuando esté tibio y a la temperatura perfecta lo expandimos por el cuerpo, masajeando en círculos hasta dejar una fina capa de chocolate sobre la piel.
Después, lo dejamos reposar para que el cuerpo absorba todos los beneficios que aporta el cacao, desde controlar la presión arterial a proteger las neuronas del cerebro. Pero, además, hidrataremos nuestra piel y reduciremos las manchas que aparecen en algunas zonas de nuestro cuerpo.
Cinco razones para hacerse un masaje de chocolate
Un masaje de chocolate aporta beneficios a nuestra salud, pero también es muy bueno desde el punto de vista estético. Aquí te vamos a ofrecer cinco buenas razones para decantarte por este tratamiento.
Razón psicológica: reduce el estrés. Un masaje con chocolate relaja el cuerpo y también la mente y elimina la posible ansiedad acumulada en el trabajo o en el día a día. Después de este tratamiento tendremos un mejor estado de ánimo y estaremos dispuestos para afrontar la rutina diaria con energías renovadas, gracias en parte a la serotonina que aporta.
Razón estética: hidrata, nutre y revitaliza la piel. Además del proceso de tonificación, el masaje de chocolate, suaviza la piel y la fortalece ante futuras agresiones, por lo que su aspecto nuevo y mejorado durará muchos días.
Razón física: elimina las células muertas. Con el masaje de chocolate estamos exfoliando nuestro cuerpo y reduciendo la cantidad de piel muerta presente en la capa más expuesta a las agresiones externas. No sólo eso, también ayuda a tonificar los músculos gracias a las propiedades del cacao.
Razón saludable: actúa sobre el metabolismo. El cacao es rico en calcio, potasio y magnesio por lo que un masaje de chocolate traslada todos esos minerales a nuestro organismo. Pero, además, contiene cafeína y teobromina que actúan sobre el metabolismo favoreciendo la eliminación de los adipocitos, que son las células encargadas de producir y almacenar grasas.
Razón global: reduce la celulitis. El masaje de chocolate ayuda a reducir la inflamación del tejido celular que hay en las capas interiores de la piel por lo que ayuda a reducir la celulitis. Si te ves mejor física y estéticamente, sin duda estarás mucho mejor psicológicamente.
Los masajes de chocolate son una gran experiencia de salud, belleza y bienestar. Descubre todos los beneficios de la chocolaterapia, qué tipos de tratamiento existen y cómo afectan a nuestro organismo.