Cada 5 de junio desde el 1973 se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, una jornada que nos sirve para reflexionar un poco más en detalle sobre el estado de nuestro planeta y qué debemos hacer para frenar y reducir su deterioro. Una de las conclusiones más unánime es que cuidar el medio ambiente supone un esfuerzo constante y global. El agua es precisamente uno de los elementos que más atención necesita, por eso en esta ocasión, por nuestra parte, queremos hacer especial hincapié en el cuidado del agua como mecanismo para proteger el medio ambiente.
Según la World Wildlife Fund (WWF) solo en España existen 300.000 vertidos a cauces superficiales. Los sistemas inadecuados de depuración en los núcleos urbanos, la filtración de productos fitosanitarios utilizados de manera inadecuada y el incumplimientos de otras normas a gran escala son algunos de los problemas fundamentales del agua.
Según la WWF en España existen 300.000 vertidos a cauces superficiales
Por eso es fundamental que empresas y organismos públicos empleen todos sus esfuerzos en la depuración de aguas residuales e industriales, así como la inversión en tecnología, campañas de concienciación y control para el cumplimiento de las normas en este ámbito.
Sin embargo cada uno de nosotros, como individuo, también tenemos nuestra parcela de responsabilidad en lo que a contaminación se refiere y, por lo tanto, también tenemos en nuestras manos la posibilidad de aportar nuestro grano de arena en mejorar el medio ambiente.
¿Cómo evitar la contaminación del agua?
Pequeños gestos diarios pueden ser determinantes a la hora de revertir la contaminación de nuestra agua. El sentido común nos lleva a evitar cierta contaminación directa, como es arrojar residuos en lagos, ríos o el mar. Pero existen otras cuestiones cotidianas igual de importantes.
¿Te has parado a pensar en lo que derramas por tu fregadero o a dónde va a parar el agua con detergente que sale de tu lavadora?
No deseches por los desagües aceite, pintura, amoníaco o cualquier otro producto tóxico. Presta atención a los producto de limpieza que utilizas, escoge aquellos más respetuosos con el medio ambiente, a poder ser biodegradables, y optimiza su uso. Adiós a poner una lavadora cargada de detergentes y suavizantes pero con 4 prendas. Aplica exactamente lo mismo a tu lavavajillas.
Si tienes un huerto particular, opta por la agricultura ecológica y evita en su mayoría fertilizantes, pesticidas o plaguicidas químicos, terminarán filtrados por la tierra e irán directamente a nuestra agua.
Haz un uso responsable de este recurso, esto también influirá en la calidad del agua. Nos llevan diciendo desde pequeños que no dejemos correr el agua del grifo innecesariamente o que cambiemos los baños por la ducha, y llegados a adultos parece que aún no hemos aprendido la lección. Pues va siendo hora.
Más de 1'5 billones de personas en el mundo no tienen acceso a agua segura para el consumo
Pero sobre todo debemos fomentar una conciencia colectiva sobre la importancia del elemento. Abrir el grifo y obtener agua potable es un privilegio que no debemos dar por sentado. Más de 1'5 billones de personas en el mundo no tiene acceso a agua limpia y fiable para el consumo y cerca de 4 millones de personas mueren anualmente a causa de enfermedades relacionadas con el agua. Si no le ponemos remedio ahora, mañana quizá sea demasiado tarde.
No pongas como excusa eso de '¿qué puedo hacer yo como individuo? ¿de que sirve lo que yo haga mientras las grandes industrias...?' Tu haz tu trabajo, cada acción tiene su reacción y si eres respetuoso con el medio ambiente, él te lo agradecerá.