A Coruña es la segunda provincia española con más kilómetros de costa (956), solo superada por las Islas Baleares. En ella podemos encontrar playas urbanas más accesibles pero también arenales casi salvajes que son auténticos paraísos. En todas las banda sonora corre a cargo del Océano Atlántico. En este post hacemos un recorrido por las mejores playas de A Coruña. ¿Te vienes?
Carnota
Sus siete kilómetros la convierten en la playa más grande de Galicia. Su forma es de media luna y con bajamar algunos tramos superan los 500 metros de ancho. Es un arenal salvaje impresionante cuyo telón de fondo es otro lugar único: el monte Pindo. Se puede acceder por varios puntos siendo el más habitual el de Boca do Río, donde se ha habilitado un aparcamiento. En esta zona hay unas marismas, una laguna interior y dunas de gran tamaño que conforman un paisaje natural muy especial de interés ecológico al servir de refugio a multitud de aves.
Area Maior, Louro (Muros)
A diez minutos de Carnota está otra playa espectacular, la de Area Maior. Tiene un kilómetro de longitud, es de arena blanca y fina y dos son los elementos que la hacen especial: la laguna de Xarfas y el monte Louro, situado justo en uno de los laterales del arenal cumpliendo una función de protección natural. A ello hay que sumarle un cordón dunar que, en algunos casos, alcanza los 14 metros de altura. El acceso es a través de una pasarela de madera.
Razo (Carballo)
Una playa imprescindible para los amantes del surf. En sus cinco kilómetros hay oleaje de diferentes tipos, por lo que es perfecta tanto para los expertos de la tabla como para los que quieran iniciarse (hay una escuela en la que poder hacerlo). Es una playa de arena fina y blanca en la que, habitualmente, sopla el viento con fuerza, por lo que también es perfecta para practicar otros deportes acuáticos, como el kitesurf o windsurf. A todas estas características hay que sumarle aún una más: Razo es una playa fósil; cuenta con una zona de acantilados de cantos y arena (en vez de roca dura) en los que poder observar distintos estratos que muestran cómo evolucionó la playa durante miles de años (su origen se remonta al cuaternario).
O Vilar, Corrubedo
En el parque natural de Corrubedo -además de la duna móvil (1 km de largo y 15 de alto) y las lagunas de Vixián y Carregal- existen varias playas que merecen una visita. Una de ellas es la de O Vilar. Se accede por una pasarela de madera tras estacionar el coche en las inmediaciones del centro de recepción de visitantes. Es una playa virgen, con una zona rocosa con formas muy curiosas y un espacio reservado para el nudismo.
Doniños (Ferrol)
Ferrol es un ayuntamiento que cuenta con playas de ría, calas y de mar abierto. Entre ellas destaca Doniños, con una longitud de casi dos kilómetros y en las que el viento y oleaje habituales también la hacen perfecta para practicar surf. Una de las peculiaridades de Doniños es la laguna interior, separada de la playa por una sucesión de dunas. En una de las puntas se localizan los restos de un castro, el de Lobadiz, así como de una batería de artillería del siglo XVIII. Si queremos disfrutar de unas vistas únicas de todo el arenal (además de una buena fotografía) recomendable subir hasta Monteventoso.
Laxe
La constatación de que una playa urbana también puede ser un auténtico paraíso. Su ubicación, dentro de la ría, hace posible que sus aguas sean tranquilas pese a que estemos en la Costa da Morte. Cuenta con servicios y un paseo marítimo, por lo que también es perfecta para aquellos que prefieren caminar en vez de bajar a la arena. En este caso, merecerá la pena hacerlo para comprobar lo fina y blanca que es.
Mar de Fóra (Fisterra)
Y de una playa urbana nos vamos a otra totalmente salvaje y alejada de una población, la de Mar de Fóra, a siete minutos en coche del faro de Fisterra, ese lugar mágico en el que supuestamente se acaba el mundo. La tranquilidad y la desconexión están garantizadas en este espacio, ya que es muy poco concurrido. Hay que ir mentalizado de que el viento soplará con fuerza y de que el mar aquí siempre ruge con fuerza. A cambio, se podrá disfrutar de unas puestas de sol únicas.
A Frouxeira (Valdoviño)
Un arenal de más de tres kilómetros con varios accesos y tipos de zonas. La más urbana y concurrida es a la que se accede por el pueblo de Valdoviño, mientras que Outeiro y La Cristina -con dunas de gran tamaño- son arenales en los que poder tomar el sol casi en total soledad. A Frouxeira cuenta con un gran valor paisajístico y medioambiental ya que en ella hay una laguna -con isla incluida- en la que viven diferentes aves, como ánades, garzas reales, cuervos marinos o halcones. Un paseo rodea la playa desde la zona conocida como “Praia Pequena” hasta la laguna, por lo que Valdoviño es una opción ideal para aquellos a los que les guste caminar y correr al lado del mar.
Pantín
También en el concello de Valdoviño está Pantín, todo un referente para los amantes del surf. De hecho, en ella se celebra el Pantín Classic, un campeonato de la World Surf League (es la competición de este tipo más antigua de España). Es un arenal de casi un kilómetro, en el que surfistas comparten espacio sin problema con familias con niños, que suelen asentarse en la zona donde desemboca un río. En un lateral de Pantín hay otra playa, la de Porto Carrizo, cuyo acceso -a través de unos acantilados- hace que solo unos pocos disfruten de su particular tranquilidad. Aquí el viento apenas sopla y el mar está mucho más calmado; un auténtico paraíso.
Morouzós (Ortigueira)
Finalizamos este recorrido por las mejores playas de la provincia de A Coruña en Ortigueira, en concreto en Morouzós. Se trata de un arenal grande (más de dos kilómetros de longitud), con una arena oscura y oleaje moderado. Una de sus singularidades es el pinar que la rodea, así como la zona de dunas y la isla de San Vicente, conformando un paisaje único. Está dotada con todo tipo de servicios y acceso para minusválidos.
Desde luego esta ruta por las playas de A Coruña es la excusa perfecta para realizar un viaje de fin de semana. Nosotros te proponemos que, después de tanta aventura por las mejores playas, te acerques a nuestros balnearios Caldaria y disfrutes del relax como colofón final a unas vacaciones perfectas. ¿Te apuntas?
