Parece que no hay verano sin playa, aunque sea uno tan atípico como este. Aunque el modo de hacer turismo ha cambiado (hay que tener en cuenta una serie de normas), queremos disfrutar igualmente del buen tiempo y de la brisa del mar. Hemos recorrido la costa por las playas de Lugo y las de A Coruña. Hoy viajamos hasta la provincia de Pontevedra para hacer un recorrido por sus mejores arenales. ¿Te vienes con nosotros?
Os Muíños (A Guarda)
Ir a la playa siempre es un buen plan, pero si te proponemos visitar un arenal cuyas dunas se encuentran dentro del Parque Nacional Esteiro do Miño y cuyas aguas son una mezcla del agua dulce de este río y del agua salada del Océano Atlántico, el plan se convierte en un viaje de lujo. Este extenso arenal (400 metros de longitud) posee arena fina y blanca y unas aguas tranquilas perfectas para el baño en familia. Está catalogada como playa semiurbana, tiene fácil acceso tanto a pie como en coche y, por sus múltiples servicios, se le distingue, un año más, con la Bandera Azul. Esta zona también es Zona de Especial Protección para las Aves, por lo que, desde la cercana Estación de Ornitología se organizan excursiones y paseos para disfrutar de la fauna local. Completa tu visita acercándote hasta el Museo del Castro de Santa Tecla, un espectacular yacimiento castreño que fue declarado, en el año 1931, Monumento Histórico Artístico Nacional así como Bien de Interés Cultural.
A Lanzada (O Grove)
Si buscas una playa espectacular acércate hasta A Lanzada, está considerada la mejor playa del Atlántico Europeo. Situada entre los municipios de Sanxenxo y O Grove, es un arenal de 2 kilómetros y medio de longitud y hasta 20 metros de ancho. Es una playa abierta de arena blanca y con bastante viento y oleaje, lo que la convierte en uno de los lugares favoritos de los surfistas. La playa, al ser tan larga, está divida en tres tramos: playa de A Lanzada, playa de Lapa y Areas Gordas. Forma parte de un extenso humedal con dunas denominado Espacio Intermareal Umia-O Grove y pertenece a la Red Natura 2000. Actualmente, esta zona es de especial protección debido a su interés natural. Muy cerca de estos arenales se encuentra la Capilla Ermita de Nuestra Señora de A Lanzada, de estilo románico, construida en el siglo XIII. A su lado puedes disfrutar de las vistas de un castro y una necrópolis. Visita imprescindible si estás veraneando en las Rías Baixas.
Castiñeiras (Aldán)
Recorrer la Ría de Aldán es todo un lujo para los sentidos. Una de las playas más impresionantes es la de As Castiñeiras, situada en la parroquia de O Hío (Santo André), en el lugar de Pinténs, en Cangas do Morrazo. Es una playa resguardada de arena fina y con una longitud de 250 metros y aguas cristalinas. Está aislada por lo que no hay demasiada afluencia de gente durante el verano y tiene formaciones rocosas que la convierten en un lugar pintoresco y de especial belleza. Al formar parte de una serie de calas resguardadas, es perfecta para acceder a ella en velero o barca.
Rodas (Illas Cíes)
Si te decimos que, en el año 2007, ‘The Guardian’ catalogó la playa de Rodas como la mejor del mundo, ya no tienes excusa para visitarla. Y es que las Illas Cíes no defraudan. Es un trozo de paraíso en la Tierra que se encuentra dentro del Parque Nacional de las Islas Atlánticas, donde puedes disfrutar de aguas cristalinas y arena blanca así como observar la flora y la fauna del lugar. La playa de Rodas tiene alrededor de 1300 metros de longitud y unos 60 metros de anchura y, por supuesto, cuenta con Bandera Azul. Al estar dentro del Parque Nacional y ,durante la temporada estival, está regulada (al igual que todas las islas) por lo que quizá debes reservar antes de acercarte a este maravilloso enclave.
Ladeira (Baiona)
Nos movemos hasta Baiona para disfrutar de casi dos kilómetros de playa de arena blanca y fina en la parroquia de Santa Cristina de A Ramallosa, en el lugar de As Areas. Es una ensenada con poco oleaje, flanqueada por la la desembocadura del río Miñor y sus marismas que conforman un extenso humedal. A Ladeira y sus alrededores forman parte de la Red Natural 2000 y es Zona de Especial Protección de Valores Naturales, de ahí la importancia de su conservación. Al estar orientada hacia la bahía de Baiona, está fuertemente resguardada, por lo que es un lugar tranquilo en el que disfrutar de la belleza de la naturaleza en todo su esplendor.
¿Ya conocías estos arenales de las Rías Baixas? Si no es así te recomendamos una visita tanto a las playas como a los pueblos cercanos y después, para eliminar el exceso de sal en tu piel, disfruta de las aguas termales de nuestros balnearios Caldaria. ¡Un broche perfecto para unas vacaciones de relax!