Hoy queremos hablarte de uno de los tratamientos que tenemos disponibles en nuestra carta del balneario de Laias, la sauna finlandesa De orígenes muy antiguos (se tiene referencia de las primeras en el año 7.000 antes de Cristo), este tipo de saunas proliferaron en Europa del Este por varios motivos, entre ellos la disponibilidad de madera para construirlas, así como toda una cultura que giraba en torno a ellas. Era en las saunas en donde se realizaban negocios, en donde discurría buena parte del ocio además de ser un lugar para calentarse en una tierra tan fría. Así mismo, era un lugar habitual en el que las mujeres parían debido a que eran los entornos más estériles de los que disponían. A diferencia de otros lugares, en la antigua Escandinavia ya había toda una cultura de la higiene. Nuestros antepasados realizaban baños y rituales de limpieza en saunas una vez a la semana, muy por encima de la rutina de higiene de los habitantes de otras partes de Europa.
Actualmente, Finlandia sigue rindiendo culto a las saunas ya que forman parte de la identidad de su pueblo. No es difícil encontrarlas a lo largo de toda la costa y hasta en pequeños apartamentos. Incluso el Parlamento finlandés posee una. Otra a destacar es Pyhäsalmi Mine, una sauna situada a 1.400 metros de profundidad, de la que hablaremos más adelante en este post.
Qué es una sauna finlandesa
Después de hacer un pequeño repaso por la historia de las saunas en la antigua Escandinavia y en Finlandia, queremos explicarte detalladamente en qué consiste este tipo de instalación. También conocida como sauna seca, es un entorno normalmente construido de madera en el que la gente puede relajarse. Muy al contrario de lo que se cree, no hay ni agua ni un excesivo vapor en ella. La humedad ronda entre el 5 y el 20% y su estufa central puede llegar a alcanzar temperaturas de 80 o 100 ºC.
«Primero construye una sauna y luego tu hogar», proverbio finlandés
La estructura está compuesta por varios bancos corridos situados a diferentes alturas en torno a una estufa, situada siempre en el centro, que calienta toda la estancia. Dicha estufa, actualmente, suele estar compuesta por una resistencia eléctrica, que es la que calienta un grupo de piedras volcánicas que, a su vez, distribuyen el calor por toda la sauna.
Beneficios de la sauna termal
Además de ser un lugar para relajarse, tiene fines terapéuticos muy demandados en la actualidad. Si vas a asistir a una sesión de sauna finlandesa debes tener en cuenta que el excesivo calor puede ser perjudicial en algunos casos. La recomendación es que no permanezcas en ella más de 15 minutos seguidos y que realices este ritual como mucho dos veces a la semana. Además, debes hidratarte muy bien antes, durante y después de permanecer en ella. Si tienes algún tipo de enfermedad debes consultar primero a tu médico la conveniencia de utilizarla. Pero aún así, son mucho los beneficios que aporta.
El cuerpo humano está predispuesto a absorber toxinas con casi todo lo que consume o mientras está expuesto a cualquier cosa. Una sauna finlandesa es un buen método para eliminarlas. ¿Cómo? A través del sudor. Las altas temperaturas que alcanza este tipo de baño seco ayuda al cuerpo a depurarse y a limpiarse de una forma natural. Tanto el estrés, al que estamos muy habituados en la actualidad, como la falta de sueño también provoca que el cuerpo adquiera más toxinas. Una sesión de sauna finlandesa no solo te ayudará a deshacerte de ellas, sino también a relajarte.
Bacterias, virus, hongos… el cuerpo humano está muy expuesto a todo tipo de amenazas y cuanto mejor sea su sistema inmune más preparado estará para luchar contra ellas. En la actualidad, más con la pandemia de coronavirus que el mundo está viviendo, es necesario cuidar la salud lo máximo posible. La humedad y las altas temperaturas de una sauna finlandesa ayuda a reforzar el sistema inmune. Una vez más el sudor entra en juego aquí. Es a través del sudor y la eliminación de toxinas cuando el cuerpo se torna más resistente. Es equivalente, y complementario, a realizar ejercicio o llevar unos hábitos alimenticios saludables.
Ayuda a perder peso
A través de la eliminación de líquidos el cuerpo tiende a perder peso por lo que la sauna puede ser un buen complemento en una dieta de adelgazamiento junto con sesiones de deporte moderado. Además, estar expuesto a la humedad y las altas temperaturas ayuda al metabolismo a regularse y mejora también la circulación de la sangre, vital para una buena salud. Debes tener en cuenta que la sauna lo que ayuda es a perder líquidos, no grasa, por lo que es conveniente una buena hidratación para contrarrestar esta pérdida de agua del cuerpo.
Mejora los problemas respiratorios
¿Alguna vez has realizado vahos con eucalipto para despejar tus fosas nasales o para disminuir la tos durante un proceso catarral o un ataque de asma? Si es así sabes de lo que estamos hablando. La sauna no solo abre las vías respiratorias sino que ayuda a reducir la flema y a reducir el estrés que el cuerpo puede sufrir al estar en medio de un proceso como el asma, un resfriado o una bronquitis crónica. Son numerosos los estudios médicos que afirman que ayuda a mejorar la capacidad pulmonar, el volumen respiratorio forzado y la ventilación, por lo que es muy recomendable para personas que son propensas a enfermedades respiratorias.
¿Y las contraindicaciones?
No son muchas pero hay que tenerlas en cuenta, como explicamos anteriormente. En el caso de padecer algún tipo de afección cardíaca, no es recomendable asistir a este tipo de saunas ya que la humedad y el calor expanden las vías circulatorias y las acercan a la superficie de la piel. Si se está tomando alguna medicación para el corazón, se ha sufrido un infarto reciente o se padece de presión arterial alta es mejor evitarlas.
¿Ya has probado la sauna finlandesa? Ven a nuestro balneario de Laias y disfruta de ella. ¡Te encantará!