A estas alturas, todos tenemos claro que hacer ejercicio, acompañándolo de una alimentación sana, es la clave para mantener una buena salud. La pandemia de coronavirus que nos ha obligado a confinarnos durante más de dos meses nos ha obligado a cambiar nuestros hábitos de vida y también, de hacer deporte.
De momento y a la espera de que todo vuelva a la normalidad, hemos dejado de lado los partidos de fútbol, los paseos en bicicleta, el senderismo o la natación. Pero nuestro cuerpo también necesita ejercitarse durante nuestra estancia en casa. En anteriores posts de nuestro blog HDOSO ya hemos hablado de los beneficios del yoga para nuestro cerebro o de las diferencias entre yoga y pilates. Hoy te vamos a explicar por qué una de estas disciplinas, el yoga, es perfecto para ejercitar nuestra mente y cuerpo. Además, te contaremos el mejor modo de practicarlo en casa. ¡Sigue leyendo a continuación!
Espacio adecuado
Tanto si eres un yogui principiante como si has ido a clase anteriormente, debes tener en cuenta cuál es el mejor lugar para practicar esta disciplina. Sabemos que no siempre podremos elegir un espacio amplio o al aire libre, pero dentro de nuestras posibilidades tendremos que tener en cuenta estos consejos:
- Que sea el lugar más tranquilo de la casa
- Que tengas espacio suficiente para realizar tus ejercicios
- Que sea un lugar luminoso o lo más en contacto posible con la naturaleza y la luz: una terraza, el balcón, un jardín, una galería, etc…
- Que tenga buena ventilación
Está claro que no todos vivimos en los mismos espacios, pero consigue una habitación tranquila, alejada del bullicio de tu casa si vives en familia, o el lugar más amplio y luminoso si tienes la posibilidad de estar solo. En cualquier caso debe ser un lugar que te transmita paz.
Accesorios
Siguiendo la premisa de la comodidad, se recomienda el uso de una esterilla de yoga, ya que amortigua el peso del cuerpo en algunas posturas. Es fundamental que sea antideslizante. También puedes añadir una toalla de microfibra, ideal para poner encima de la esterilla y evitar así que se manche. Además, para el momento de relajación y respiración, es bueno utilizar una manta de las que denominan ‘de sofá’ para evitar coger frío tras los ejercicios.
Tanto en las librerías como en Internet podrás comprar algún libro de yoga para probar nuevas posturas o practicar diversos ejercicios.
Utiliza un ordenador con conexión a Internet para asistir a alguna clase online que podrá guiarte durante tu meditación.
Prueba también con accesorios de aromaterapia. No es nada raro, enciende un palito de incienso o una vela aromática con un perfume fresco. Evita que sea demasiado oloroso ya que podrá interferir en tu relajación. Ahora ya tienes todo preparado para realizar tu clase de yoga.
Rutina
Establecer una rutina es fundamental ya que dará un cierto orden a tu práctica de yoga. Planifica solo metas que puedas conseguir, de nada vale esperar hacer una hora cada día si, finalmente, por una cosa o por otra, debes posponerla. Por eso, te proponemos varias alternativas, como hacerlo de 15 a 20 minutos tres veces por semana, 30 minutos cada dos días o 45 minutos dos veces por semana, por ejemplo. Tú debes saber cuándo puedes sacar tiempo para estar tranquilo y en las mejores condiciones para poder desconectar.
Combina varias técnicas o ejercicios, de este modo no será tan monótono y experimentarás con diferentes posturas y modos de practicar yoga.
No siempre tenemos el mismo nivel de energía así que elige las asanas más sencillas para aquellos días en los que sientas que tu capacidad está al 100% y las más elaboradas para aquellos días en los que te sobre energía.
Estos son solo algunos consejos para practicar yoga en casa, un ejercicio que no solo ayudará a tu cuerpo a mantenerse en forma, sino también a tu mente, ya que la presión del día a día confinados puede hacer que estemos soportando estrés sin apenas darnos cuenta. ¡Pruébalo y cuéntanos los resultados!
